Desde el templo del techno, el mítico Barraca, llega una sesión en directo que lo tiene TODO: energía desbordante, crudeza mecánica y una intensidad que arrastra como un vendaval.
Al mando, Pushmann, un artesano del groove con ADN de Detroit, alma de Birmingham y la precisión quirúrgica de Berlín. Un maestro del vinilo y los tres platos, que esculpe cada set con potencia, oscuridad y loops hipnóticos hasta el paroxismo.